Aluci NO

En mis épocas de juventud había pocas cosas que me motivaran más que saber que "el viernes hay una fiesta y va fulano". Claramente fulano era el chico que odiaban mis amigas porque mis conversaciones monotemáticas giraban sólo en torno a él. Pero no era alguien en particular. Hace varios años atrás, porque negarlo, nunca me gustaba el mismo. En una semana podía estar enamorada de dos o tres al mismo tiempo. Alguno más grande del cole, de alguna fiesta, de la calle o, ¿porqué negarlo?, de la tele. No importaba quién sino la cantidad de horas de proyección y conversaciones imaginarias donde planeaba cómo iba a invitarme a salir, cómo iba a decirme que era la mujer de su vida o, más rebuscado aún, llegaba a imaginar conversaciones enteras que empezaban con "hola" y vaya uno a saber donde terminaban.
Por la calle, en el bondi, o el subte siempre recurría a los mismos delirios. Imaginaba que entraba al lugar y la secuencia fotográfica entera de cuando nos encontrábamos: si yo me acercaba, si él venía, si le tenía que tirar una lata de cerveza encima para que me mire o si solo tenía que hacerme la linda y bailar como una descontrolada arriba del parlante. Absolutamente todo estaba bajo control. En realidad, bajo MI control. La frase con la que se iba a quedar con la boca abierta, el instante preciso donde tenía que tocarme el pelo haciéndome la interesante y, obvio, el vestuario (que incluía desde si el pelo iba suelto o recogido hasta que iba a usar en los pies).
Pasaba semanas enteras planeando encuentros que pocas veces sucedían y, cuando ocurrían, (0bvio, no?) nada salía como lo había planeado. Si había imaginado decirle "querés tomar una cerveza?", generalmente pasaba que fulano estaba tomando antibióticos y su vaso más audaz era agua sin gas. Así, infinidad de tiempo, palabras, situaciones y conversaciones que a mi me tomaban toda una semana de preparación "hasta el viernes", se derrumbaban en un segundo y medio después de que en vez de "hola" (como yo lo había dictaminado), la conversación empezase con un"qué hacés?". Se me venía el mundo abajo.
Hoy, años despues de fiestas los viernes, situaciones imaginarias fallidas y terapia, me doy cuenta que NUNCA iba a salir tal cual yo hubiera querido por dos motivos. El primero es porque en el afán de querer controlar todo y que TODO salga tan perfectamente bien, me olvidaba que fulano también era una persona y que yo no le había comunicado de ante mano cuáles tenían que ser las respuestas que me iban a hacer irme a dormir con una sonrisa en la cara.
Y segundo, porque si todo pasase tal cual uno hubiese querido, sería tan aburrido como leer la última página de un libro antes de empezarlo, y no quedarían motivaciones para ir a la fiesta de los viernes...

Con la frente marchita

Ahorrate el comentario fue un espacio que me permitió durante mucho tiempo despuntar el vicio de escribir, de auto aislarme de la rutina, de decir lo que jamás hubiese dicho ni ebria, de entretener mis ratos libres, a mis amigos y a los que alguna vez pasaron a leer lo que simplemente tenía ganas de decir en ese momento.
"Se cumplió un ciclo", pensé una mañana y lo dejé en silencio. Pero no tuve la valentía de eliminarlo porque de reojo tal vez supe que hoy alguna vez pasaría...
Pasaron meses e infinidad de ganas de estar otra vez sentada frente a mi notebook con el mate, mi pijama viejo y mi marlboro box.
Pasaron meses e infinidad de ganas de que mi jefe Gucho se fuese de vacaciones y así estar tranquila y tener una cuota de inspiración.
Pasaron meses e infinidad de ganas para que la parte derecha de mi cama me preguntase "no vas a revivir tu blog?"
Pasaron meses e infinidad de ganas hasta que llamé a mejoramigo y le dije "dame ánimo...quiero retomar ahorrate"...."Animo. te llamo en 5 que estoy a mil", contestó.
Pasaron meses e infinidad de ganas hasta que después de cortar con mejoramigo, llamé a mejoramiga y le dije "vuelvo al blog"..."Por qué no volvés a la tesis en vez de pelotudear y te la sacás de encima antes de fin de año?", contestó, como si fuera tan fácil.

Así que acá estoy, sabiendo que los ciclos no se cumplen, y se abren cada vez que lo encuentran a uno desprevenido y mirando para otro lado.

Notas mentales
*La parte derecha de mi cama sigue siendo el mismo
*Mi jefe sigue siendo Gucho
*mejoramigo y mejoramiga siguen ahí, estoicos al pie del cañón
*mamá sigue recriminando que no la llamo 5 veces al día y que voy poco a comer a zapata*
*mis dietas siguen empezando todos los lunes sin grandes resultados a la vista
*sigo fumando mis religiosos 20 cigarrillos diarios
*terminé la 5ta temporada de House y duermo mal desde que sé que recién a mediados de Septiembre arranca la sexta

Conclusiones
no pude conseguir ...
bajar de peso, dejar de fumar como un guanaco, que la parte derecha de mi cama quiera un bebé de acá a los próximos 5 años, que mejoramigo deje de decir "te llamo en 5", que mamá se acuerde de marcarme cada vez que me ve más gordita "vos esta semana no te cuidaste nada, no?", dejar de pelearme con mis hermanas, no decir todo lo que pienso, volver a terapia, volver al gimnasio más de una vez por mes, dejar de pensar que algún día Gael se va a dar cuenta que Dolores no vale 2 pesos con 50 y me va a llamar (muerto de amor), volver a decir "el blog cumplió su ciclo".


*zapata es la calle donde vive mi mamá y, según ella, a donde voy cada vez menos

Pan para hoy... hambre para mañana

Hay un blog muy bueno que recomiendo leer antes del fucking Saint Valentine`s day.
www.mandaleunmensajeatuex.com

Y hay cosas brillantes de ex despiadados como éstas:

"Gracias a vos aprendí que miserable es quien se pone a discutir por la diferencia de precio de los forros", o, "me quedan 6 cuotas de nuestro viaje "romántico"..me podrías haber cortado antes, no?".

y, a mi parecer, la mejor...

"juaaa, me hice las tetas".

Por eso, en vez de tanto festejo yo miraría de reojo... no vaya a ser que el año que viene haya un mensaje de ese que el 14 tiene pensado regalarte algo tan original como un ramo de flores.

El diario de Maru Jones

Conclusiones año 2008. Edad: 26. Estado de ánimo: deprimida. Motivo: ciclotimia. Planes para revertirlo: terminar la temporada 4 de Dr. House

Posibilidad de cambio de empleo: 0
Ganas de cambiar de empleo: 0
Viajes con amigos: 4
Proyectos de viajes con amigos en el corto plazo: 2
Peleas con la parte derecha de mi cama: 1.543
Posibilidad de cambiar a la parte derecha de mi cama: 0
Propuestas indecentes: 2 o 3
Propuestas aceptadas: 0
Propuestas de matrimonio: 0
Pastillas del "día después" : 0
Porcentaje de visitas al gimnasio en los últimos tres meses del año: 5
Kilos perdidos durante los últimos tres meses del año: 0
Kilos aumentados durante las fiestas que siguen persistiendo: 3
Cantidad de affter oficce que influyeron en los kilos que no se van nunca: + 50
Cantidad de veces que empecé una dieta y la dejé: todos los lunes de marzo a diciembre
Cantidad de cigarrillos diarios: 20
Pares de zapatos nuevos: 3
Cantidad de sesiones de terapia: 0
Necesidad de retomar terapia: retomo el blog

True lies

Nunca estuve de acuerdo con esa frase que asegura que el olfato es femenino y no falla. Para ser más específica, creo que el olfato que no falla no hace distinción de sexos.
Nuestras respectivas parejas, amigos, compañeros de trabajo y personas del sexo opuesto con las que tenemos comunicación diaria, están en relación, también, con otras cientos de mujeres diariamente. Y los celos no se producen con todas y cada una de ellas, sino que nuestras descargas emotivas apuntan tal vez sólo a una de esas chiruzas. Lo mismo pasa con los hombres... ellos no van por la vida marcándonos que "todos te quieren garchonear", sino que apuntan a un X que "vos decís que es tu amigo, yo soy hombre y te digo que ese hijo de puta te quiere bajar la caña".
Bueno, lamento informarles que es así: aunque duela, aunque cueste aceptar, aunque a veces algunos prefieran vivir negando realidades, esa es una verdad irrefutable, seas nena o seas nene.
Cuando nosotras o ellos marcamos a alguien en particular es porque: o se lo agarró, o está en una etapa de histeriqueo o se lo va a agarrar.
Lloren chicos, lloren chicas, pero si el sábado le dijiste a tu novio o a tu novia "ese/esa turro/turra te quiere dar", en el mejor de los casos, todavía no ha pasado nada, pero perdé cuidado que en algún momento se van a reventar. Como decíamos, el olfato nunca falla.

El placer es mío

Mi mamá jamás se olvida de un cumpleaños. Y pensándolo bien, tampoco de los eventos familiares más importantes. Es más: desde que me fui de mi casa materna me manda mensajes de texto diciendo "es el cumple del tío, no te olvides de llamarlo", "hoy tu hermana rinde un final, llamala para desearle suerte", "caro aprobó el parcial de filosofía, mandale un mensajito para felicitarla".
No cocina pero siempre hay platos demás cuando la llamaba (y aún la llamo) y le digo "ma, en 1 hora voy a cenar... voy con X Y X, si?". El delivery siempre corre por cuenta de ella.
No cose, pero me sigue retando cuando me ve con jeans rotos, sweaters descosidos o remeras mal planchadas. A veces va mas allá: "maru, las zapatillas son para hacer deporte.. ya tenés 26 años.. ¿no es hora de descartar tus all star?"
Tenía la virtud de convencer a mi papá para que asista a las reuniones, actos y charlas en el colegio. Ante la falta de ganas de él, ella aseguraba "que vos hoy vayas a las reuniones y actos escolares te garantiza que el día de mañana tus nietos tengan, no sólo a tus hijas, sino a tus yernos sentados como vos estás hoy".
Cuando mentía o falsificaba boletines las penitencias eran una sola: "no salís hasta nuevo aviso", juraba mientras yo masticaba bronca infinita. Cuando quería ir a balir a los 14 me decía "si empezás a ir a bailar a esta edad, decime qué te queda para los 18".
Cuando me enojaba y le recriminaba que "caro es tu preferida", siempre contestaba "las tres me duelen por igual".
Se enoja cuando no la llamo o no le mando mensajitos de texto, me recrimina que voy poco a la casa, pero cuando voy no me deja ir...
Toda la vida quiso que tenga el pelo largo y ahora que me roza la cintura me propone cientos de cremas para que "no se te ponga taan feo en las puntas". Me enseñó que no sólo las mujeres se depilan, sino que tambien van a la peluquería a hacerse las manos y los pies. "Si te hacés los pies ponete un par de ojotas para que no marque", me decía las primeras veces que íbamos juntas.
Se angustiaba cuando me veía engordar por excesos de galletitas y sandwiches en el cole, me llevó al ginecólo, Castells (ya nombrado en otro post), aduciendo que "Carlos además de ser un divino, es obstetra y eso es fundamental"; me aconsejó que además del ginecólogo, al odontólogo y al dermatólogo es "prudente ir una vez por año" y que entre noviembre y diciembre debería hacerme exámenes generales "porque no te cuesta nada y te quedás tranquila".
Lee este blog todos los días y se ha llegado a convertir en mi primera y única fan. Me llama y me dice que "estás tan loocaa, maru... lo que me hiciste reir con ese post de xxx".
Cuando era chica y tenía fiebre dormía en su cama, y ahora de grande cuando me quedo a dormir también. Me reta cuando salgo desabrigada y si en verano estoy muy escotada me dice que es "poco elegante". Cuando era chica y traía notas bajas me decía "para mi lo importante es que todos los profesores me hablan de lo buena persona que sos. Un 6 en matemática se levanta y se adquiere, que vos defiendas a un compañero frente a una injusticia es lo que me hace sentir que como madre no hice las cosas tan mal. Y eso no se adquiere"
Sufre porque dice que "no puedo creer como me salió una hija bostera y peronista". Discutimos, nos gritamos, nos abrazamos, nos amamos y lo mejor de todo es que siento que camina siempre al lado mío. Nunca adelante, jamás atrás.
Quiere que la haga abuela pero dice que todavía es muy pronto. Lloró cuando me recibí, me puso los dos hombros cuando lloré por amor, dice que no le cuento mis cosas pero jamás me revisó ningún cajón. Aceptó a todos mis novios porque "yo quiero que vos seas feliz".
Me dio libertad, me puso límites y cuando llegó el momento en que hice el bolso y decidí irme a convivir con la parte derecha de mi cama me dijo "yo te di todas las herramientas que pude en esta vida. Ahora llegó el momento de que vueles y quiero que sepas algo: estoy orgullosísima de vos, Maru. Esta va a seguir siendo tu casa siempre, hija".
Se casó con 21, me tuvo con 23, fueron llegando Caro y Agus y se divorció a los 47 sintiendo que la vida le había jugado la peor pasada de su vida. Como pudo se fue reponiendo "por ustedes 3, que son la razón de mi vida" y empezó a trabajar a los 47 años. Es una leona. Así es mamá. Así es MI mamá. La mejor del planeta.

Ante cualquier duda, consulte a su médico

Ojo, que ahora con este supuesto gen que determina la predisposición a la infidelidad hay un justificativo más creíble y menos berreta que "¿no confiás en mi?"...